Basta de violencia paramilitar en San Juan Copala
Este año del bicentenario, con un terrible derroche del gobierno, que gastó 580 millones de pesos, sólo para el festejo del 15/Sep; también es el año del aumento de la represión paramilitar contra la comunidad Triqui de Oaxaca.
La Unión de Bienestar Social para la Región Triqui (UBISORT) es una organización paramilitar, ligada al PRI, dirigida por Rufino Juárez y creada por el gobierno de Oaxaca desde 1994 para controlar la zona triqui y sus recursos. Desde entonces, por medio del terror, gobiernos estatales, bajo el amparo del gobierno federal, actúan contra una comunidad que se atrevió a desafiar a los caciques locales, declarando su autonomía. Y así, permanentemente se cierra el paso al territorio indígena de San Juan Copala y se han ejecutado múltiples asesinatos, secuestros y violaciones de mujeres y niñas.
Con el desgaste de la UBISORT, abandonaron muchos de sus miembros el estado y fue el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT), quien corrompido en su interior, comenzó a ocupar el lugar de nuevo grupo paramilitar. Siendo estos dos grupos quienes hoy mantienen tomado el municipio autónomo de Copala.
Esto dio lugar a la separación de una parte de los miembros del MULT, para formar el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI), dirigido por Timoteo Alejandro, organización que en el 2007, declaró un autogobierno, sin intervención estatal ni de los partidos políticos y es el MULTI, quien hoy representa a la población.
En noviembre de 2009, los pobladores de San Salvador Atenco intentaron sin éxito ingresar a Copala, los paramilitares lo impidieron anunciando una masacre a quien se acercara a la zona. Desde entonces, se intensificó la represión y a partir de enero la comunidad está paralizada, sin escuelas, energía eléctrica, agua potable y servicio médico, aunado al cerco paramilitar que rodea el territorio e impide entrada y salida bajo amenaza de muerte. En abril, la Ubisort abrió fuego contra una caravana humanitaria, hiriendo a activistas de derechos humanos y la prensa, asesinando a Beatriz Cariño Trujillo y Tyri Antero Jaakkola.
La Ubisort y el MULT habían amenazado con volver a sacar las armas y lo cumplieron, haciendo de Copala, una guerra de exterminio contra la población indígena, que resiste en defensa de su autonomía, mientras el gobierno sigue financiando, encubriendo a los paramilitares y bloqueando los caminos.
Pero la comunidad organizada se moviliza por todos sus medios para intentar llevar ayuda a su poblado. En Copala, numerosos indígenas han perdido la vida, emboscados en su intento de salir o entrar con ayuda. Las mujeres y niñas son secuestradas, les cortan el cabello y sufren violaciones tumultuarias.
Hace unos días, el kiosko de Copala, ha sido tomado por paramilitares armados y hay por lo menos 50 familias amenazadas de muerte en esta comunidad. Hombres, mujeres y niños que no pueden salir de sus casas porque les disparan los paramilitares.
El 14/Sep. fue herida de gravedad María Rosa Francisco, la misma compañera que en días pasados estuvo secuestrada por los paramilitares del MULT. Ella no ha podido recibir atención médica, pues los agresores siguen disparando. Como este hay otros casos, donde ni siquiera se permite que la gente levante los cuerpos abatidos por las balas, incluso hay indígenas muertos por haber abierto un poco su puerta.
Estos gobiernos y terratenientes cada vez más podridos y criminales, no cesarán su campaña de exterminio paramilitar en Copala. Son responsables de muchos asesinatos, como el caso conocido de Teresa Bautista y Felicitas Martínez, locutoras de la radio del Municipio Autónomo y el homicidio del líder y fundador de Copala, Timoteo Alejandro, junto con su esposa Tleriberta. También los casos registrados el 21 de agosto, de Antonio Martínez, líder del vecino poblado de Santa Cruz Tilapa, y otras 3 personas asesinadas mientras organizaban una caravana de mujeres y niños que partiría 2 días después de Cópala rumbo a la capital.
Para denunciar lo que sucede en Cópala, 100 mujeres y niños instalaron un plantón en el centro de la Ciudad de Oaxaca y una delegación también se instalo en la Ciudad de México, ambos fueron retirados por las celebraciones del bicentenario, pero las mujeres han iniciado una huelga de hambre como forma de denuncia y en protesta ante la impunidad que impera en la zona, en defensa de sus derechos humanos, denunciando las violaciones de mujeres, el bloqueo y señalando a Ulises Ruiz, como el principal responsable luego del gobierno de Calderón.
Por el derecho a la autodeterminación de San Juan Copala
Abajo la complicidad de los gobiernos federal y estatal con los caciques y terratenientes en Oaxaca
Abajo Ulises Ruiz, genocida criminal
Basta de represión Paramilitar
Fuera paramilitares de Oaxaca
Justicia para las mujeres triquis de Copala
Juicio y castigo para los autores materiales e intelectuales de los asesinatos
Alto a la militarización del país
AGRUPACION DE MUJERES PAN Y ROSAS
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