Hacemos claro que nuestras movilizaciones apoyados por el movimiento estudiantil y organizaciones sociales en exigencia primeramente a la Delegación Cuauhtémoc y en lo consecuente, al Gobierno del Distrito Federal, nos permitieron el logro a la reducción a un adeudo del servicio de agua, con el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, que aun nos coloca en condiciones desfavorables por nuestra condición de escasos recursos y la falta de dinero para completar la liquidación. Sabemos bien que el incumplimiento al pago podría generar repercusiones serias para el proyecto de la Casa Nacional del Estudiante, repercusiones como el desalojo del inmueble, ocasionándonos un problema para poder seguir estudiando y seguir recibiendo más generaciones en el futuro.
De igual manera manifestamos la falta de voluntad por parte del Gobierno del Distrito Federal por no resolver el serio problema que se presenta con el ambulantaje que se inscribe en la periferia de la Casa Nacional del Estudiante, imposibilitándonos el paso para el suministro de alimentos que hacemos en gran proporción y periódicamente, que por causa del trafico generado por el ambulantaje en muchas ocasiones nos ha imposibilitado las tareas de suministro; cabe mencionar también que las estructuras utilizadas para las ventas de los comerciantes, están fijadas a la estructura de la CNE, mediante clavos, nudos en ventanas y de igual manera, al estar cercando la periferia del espacio impiden su natural ventilación e iluminación, y permanece el ruido constante.
Observamos que todas estas problemáticas dependen en gran medida del no reconocimiento de este espacio con sus características por parte de los distintos niveles de gobierno, pues por ejemplo, ese adeudo de agua que manifestamos no pudo desarrollarse sino es porque las autoridades consideran este espacio como un multidepartamental donde el cobro es abismalmente diferente a un espacio colectivo como casa de estudiantes; de igual manera en otras instancias se considera este espacio como hotel; respecto al mantenimiento y deterioro del inmueble es una situación que ninguna autoridad se hace responsable siendo este un edificio catalogado por el INAH e INBA.
Estas condiciones ponen en riesgo la integridad y vulnera la posibilidad de seguir estudiando a los compañeros que habitamos el espacio de manera responsable y activa. Es por tal motivo que solicitamos en primer lugar el respeto a la autonomía ganada con trabajo y con organización democrática de estudiantes que de igual forma también son luchadores sociales, ya que la intromisión por parte del Gobierno del Distrito Federal en nuestra vida orgánica por medio de sus pseudo-estudiantes, comerciantes e intentonas de desalojo por nuestro adeudo no son justificación para desconocer el espacio y cedérselo a quienes buscan intereses fuera de los criterios marcados por la Constitución Mexicana en su Artículo 3º fracción II y VII.
Por todo esto es que pedimos la solidaridad de las Organizaciones Sociales en caso de un desalojo por parte de los que se dicen estudiantes al interior que están al servicio de los intereses de la Delegación y GDF, comerciantes o Fuerza Pública. De igual manera les pedimos a las Organizaciones de Derechos Humanos y estudiantiles estar al pendiente de cualquier acción pues ya hemos sido violentados en reiteradas condiciones, y pesa sobre algunos compañeros la amenaza a ser expulsado por el simple hecho de ser activistas. Responsabilizamos al Gobierno del Distrito Federal de cualquier intención de querer legitimar ilegalmente cualquier organización al interior del espacio pues al estar conformados como Asociación Civil, es la asamblea junto con la mesa directiva y representación legal, estos últimos como administración al interior en caso de conflicto, los que determinan de manera autónoma el rumbo de nuestra institución.
Atentamente
Honorable Casa Nacional del Estudiante.
Por la defensa y fomento de la educación critica, científica, gratuita y popular
Solicitamos a las organizaciones la solidaridad económica y su apoyo en pronunciarse en contra de la intervención del GDF con estudiantes al interior, y así mismo la solución del despeje de las áreas del inmueble invadidas por los comercios respetando el trabajo de cada uno de los comerciantes de la zona.
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