Imagen del Golfo / Agencia Imagen del Golfo
2010-11-28-17:17:06 Xalapa
En la explotación de la mina de oro “Caballo Blanco” en el municipio de Actopan, la empresa canadiense Goldgroup dejó de lado consideraciones como fisuras en los reactores de la planta nucleoeléctrica Laguna Verde.
En la explotación de la mina de oro “Caballo Blanco” en el municipio de Actopan, la empresa canadiense Goldgroup dejó de lado consideraciones como fisuras en los reactores de la planta nucleoeléctrica Laguna Verde, provocadas por el moviendo de tierra que habrá en la zona, pues está ubicada a muy pocos kilómetros de distancia del proyecto minero, eso va más allá de hablar de daño ambiental, agrario y social, es hablar de la existencia de todo un territorio, alertó La Asamblea Estatal Veracruzana de Alternativas y Defensa Ambiental (LaVida).
Hace algunas semanas el saliente gobernador Fidel Herrera Beltrán anunció de manera oficial la explotación de la mina Caballo Blanco lo que generará “empleos y desarrollo”.
Para el proyecto se espera una inversión inicial de 500 millones de pesos.
Sin embargo en entrevista con algunos integrantes de LaVida, se expuso la contra parte del proyecto metalúrgico.
LO EFÍMERO
De inicio Juan Manuel González Muñoz opinó que la explotación depredadora, como es la minería, implica no sólo acabar con los recursos minerales y naturales, sino dejar en la mayor miseria a las poblaciones de esas tierras.
“Van a tener empleos posiblemente durante unos 15 años, siendo optimistas, de ahí no van a tener nada, sus tierras valdrán un comino, porque no habrá agua, porque no habrá vegetación. Lo único que crea la minera es la desertificación, aparte de conflictos sociales”.
Respecto de los conflictos sociales, abundó que se tiene registro de casos donde aquellos que pretenden enfrentar a la empresa minera con tal de que no sean destruidas sus tierras, han sido expulsados no por la iniciativa privada, sino por el resto de la comunidad que se dejó convencer fácilmente de los supuestos beneficios.
EL DESPOJO
Abigail Marín Medina remarcó que a la fecha los pobladores de esa región se sienten impotentes, toda vez que el gobierno del estado ha llegado a decirles que deben vender sus tierras o de cualquier forma se las van a quitar.
“Carecen de la información elemental, no les han explicado ni siquiera en qué consiste el proyecto minero y cuál es el impacto real. Ante la falta de información y los comentarios del gobierno de que o se las venden o se las quitan, se sienten indefensos, ojalá eso genere un proceso de organización en las comunidades afectadas”.
EL AGUA
Al problema ambiental, agrario y social de la planta nucleoeléctrica se suma el del consumo de agua.
Como ejemplo está la minera de Mazapil Zacatecas, ahí se estima que Goldgroup para hacer el proceso de lixiviación utiliza 50 millones de metros cúbicos de por año de agua, esto es, 50 mil millones de litros de agua anuales.
“Obviamente les van a quitar el agua a las comunidades, y ellas de cierta manera están preocupadas porque actualmente toman el agua de nacimiento”, expuso Abigail Marín Medina.
LAGUNA VERDE
Además, dijo Abigail Marín Medina, con el proyecto Caballo Blanco la planta nucleoeléctrica Laguna Verde se convierte en una zona de aun más “alto riesgo“.
“Antes de que se ubicara ahí (Laguna Verde) se tuvieron que hacer unos estudios sobre sismos, el comportamiento histórico, porque de ante mano la característica es que además de que debe haber agua, debe ser una zona no sísmica, entonces qué pasaría con esta minera que va provocar movimientos de tierra, y en un momento dado existe el riesgo latente de que provoque una fisura en un reactor”, subrayó.
Por lo tanto, “podríamos estar en riesgo no sólo las poblaciones aledañas sino todo Veracruz, todo el territorio, por una fuga de energía atómica”.
Abigail Marín Medina precisó que de acuerdo con datos de un especialista en el tema, en un radio de 16 kilómetros alrededor de la Laguna Verde, no se puede ni siquiera arreglar las carreteras, por el ligero movimiento sísmico, mientras que Caballo Blanco está a sólo tres kilómetros.
Además, la cantidad de metal que pretenden sacar del proyecto es apenas 0.01 onzas por tonelada de tierra, esto es, 0.3 gramos de oro por tonelada de roca, es decir, “el movimiento de tierra va ser muy fuerte y grave”.
SIN INFORMACIÓN
La organización LaVida ha gestionado a través del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información (IVAI) un informe del proyecto metalúrgico, así como la manifestación de impacto ambiental, entre otros informes.
No obstante la repuesta fue que la información sería entregada de manera presencial, sin documentos, ni medios electrónico de por medio, es decir, sólo de manera oral.
“El acceso a la información es otro problema, más que facilitar, complica las cosas, esto obedece a intereses más poderosos, no sólo estatales o federales, sino organizaciones a nivel internacional”,así lo explicó Moisés Pérez Silva.
La organización
Tras preguntarles si pretendían organizar a la población de la región, el también integrante, Jorge Salazar, comento que lo que procede es informarla, toda vez que se están tomando decisiones que van a afectar sus recursos naturales.
“Tenemos la obligación moral, ciudadana, veracruzana, de dar esa información, si la poseemos y la buscamos. La población (afectada directamente) tendrá que organizarse si así lo desea y si pide el apoyo entonces apoyarlos, porque de lo contrario sería entrometernos con la población”.
En ese sentido reprochó lo desarregladas que están las leyes para la minería, lo que genera una desprotección a los espacios y población, pues las mineras “llegan a desmantelar todo lo que es su aspecto vital, incluyendo territorio, cultura y formas de organización”.
Añadió que la industria minera está considerada de interés público, “está por sobre todo lo demás”, por lo cual “creemos que una confrontación directa solamente se podría dar a través de los medios políticos y muy organizados de todos los involucrados”.
Carmen Huerta añadió que además de informar a los pobladores es necesario hacer una denuncia en todos los niveles. Como ejemplo citó los foros que se realizan a nivel nacional e internacional. Esta acción permitirá que más gente con peso político y académico se entere del problema y ponga la alerta.
LA RECONQUISTA
El ambientalista Alejandro Vázquez recordó la insuficiencia del marco legal y puso como ejemplo la minera San Javier, ahí los ambientalistas han ganado varios juicios en contra de la empresa, sin embargo, nadie ha actuado.
“Estamos viendo con tristeza como hay una nueva reconquista, no sólo en el caso de las mineras, también de los ríos, de la tierra misma, están reconquistando, pasando por encima de los pobladores y aprovechándose de la pobreza y falta de información, y de un gobierno, en sus tres niveles, que se presta completamente a ese tipo de maniobras”.
El TLC
El periodista y activista social también integrante de LaVida, Javier Alpízar recalcó que no es casualidad que se trate de una empresa canadiense la protagonista de explotar la mina en Actopan y Alto Lucero, pues recordó el Tratado de Libre Comercio (TLC).
“Con el TLC se crean leyes que están a favor de las empresas, de los capitales, por encima de todo derecho de tipo nacional, soberanía y de los derechos humanos mismos; funcionan más que las constituciones mismas”.
Además, siguiendo los modelos europeos, dijo, en tratados como el TLC se ponen cláusulas para poder justificarse ante cualquier instancia internacional de que se cuenta con instituciones a favor de los derechos humanos, un instituto de acceso a la información, entre otros organismos, “lo que quieras y mandes, aunque en realidad a los ciudadanos no les sirvan”.
Finalmente los entrevistado se pronunciaron por que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de a conocer su postura, pues en la zona hay un cementerio prehispánico y la dependencia nada ha dicho al respecto.
http://www.imagendelgolfo.com.mx/resumen.php?id=214307
No hay comentarios:
Publicar un comentario