[Documento presentado por Ángel Benhumea Salazar en el 3er Foro de la Asamblea Académica (AUA) el día 15 de Abril de 2010.]
La Crisis actual del Sistema Capitalista es una crisis Mundial de carácter GENERAL, de todos los ordenes Económico, Social, Político, Cultural, Cultural e Ideológico, que abarca el conjunto del sistema mundial y que cuestiona los sustentos ideológicos de dominación burguesa, la cual agrava de manera considerable la situación de la clase Obrera, de los Trabajadores del Campo, la Ciudad y el Mar y de todos los explotados y oprimidos. El capitalismo enfrenta hoy la crisis más profunda de que se tenga memoria.
La crisis de sobreproducción, se desarrolla en el Mundo y en México de manera acelerada, no obstante los grandes recursos que se han canalizado para evitar a catástrofe. Grandes STOKS de productos de productos se encuentran depositada en fábricas y almacenes, sin posibilidad de convertirse en mercancías, en el corto y mediano plazo, de ser adquiridas, por cada vez más grandes contingentes de desempleados y por millones de trabajadores con salarios miserables y sin seguridad social, sin posibilidad de adquirir los alimentos necesarios y servicios elementales para su supervivencia.
Miles de pequeñas, medianas y grandes empresas Industriales de Servicios y no pocas Bancarias y Financieras están en bancarrota, algunas empresas trasnacionales y monopólicas apoyadas por el Estado se comen a las demás. De manera vertiginosa, la concentración del capital comercial, de servicios, industrial y financiero pasa a su fase centralizada. Toda la riqueza social creada por los obreros y trabajadores del campo y la ciudad en manos de un grupo cada vez menor de insaciables capitalistas.
El imperio ha sido incapaz, hasta el momento, de reproducir un modelo económico alternativo al caduco modelo neoliberal, por lo cual se ve obligado a recurrir a otros viejos modelos de acumulación, como el keynesianismo y al vituperiado Capitalismo Monopolista de Estado.
Ante ésta situación sin precedentes, su Estado Capitalista surge como “el gran salvador” de esta crisis sin solución, reprime, asesina, subsidia, compra, ayuda, regala,, viola sus propias leyes, extorsiona, TAMBIÉN DE MANERA GENERALIZADA. Y sobre todo se apropia indiscriminadamente de los recursos de todos los contribuyentes, de los ahorros, de las pensiones y jubilaciones, de los salarios de las prestaciones, de las conquistas y de las organizaciones de la Clase Obrera, de los trabajadores del campo y la ciudad, para intentar evitar la gran DEVACLE, una GUERRA de clases en toda su intensidad.
Como todos sabemos, la economía mexicana es una de las economías más ligadas y dependientes de la Norteamericana, por lo que la crisis en México tendrá mayor profundidad y duración. Independientemente de la crisis en E.U. y Mundial, México se encuentra sumergida en una crisis de carácter estructural, el capitalismo mexicano, y su modelo Neoliberal desechado ya por otros países, no satisfacen las necesidades más elementales de los mexicanos de trabajo, alimentarias, de salud, vivienda, educación, seguridad social.
Más de 60 millones de mexicanos viven en la miseria y sin seguridad, social, 18 millones de trabajadores mexicanos subsisten con escasos dos salarios mínimos, 8 millones y la ciudad se ven obligados a emigrar al extranjero en busca de mejores condiciones de vida, las remesas enviadas por los mexicanos en el extranjero han disminuido en 5 mil millones de dólares, el trabajo informal supera 10 millones de mexicanos, la crisis productiva en el campo desborda todo mecanismo de control y subordinación de los distintos trabajadores del campo a las instituciones corporativas del Estado Mexicano. Que durante 60 años le funcionaron.
La crisis en México ha generado escasez y aumento en los precios de los productos básicos y agrícolas, se manifiesta, entre otras, en Industria manufacturera y en la industria automotriz mexicana y necesariamente en industrias conexas y dependientes de esta. El desempleo ha crecido sustancialmente, a pesar de lo que diga el gobierno, así como la deuda pública y privada, alza en todos los servicios a la población. En México, el mayor precio de los alimentos eleva hasta en 100 mil millones de pesos, equivalente a un punto del PIB, por pago de importaciones de alimentos, que afectan cada vez más a todos los mexicanos. Vivimos un proceso inflacionario ascendente, aunque el mal gobierno lo niegue.
La política salarial y laboral del gobierno es un fracaso, quita todos los derechos sociales y laborales, conquistadas por los trabajadores durante un siglo, como las prestaciones, la seguridad social, con las reformas al IMSS y al ISSSTE. Elimina sus organizaciones sociales y políticas, y se propone terminar con ellas, con la modificación de la Ley Federal del Trabajo.
El mal gobierno ha cometido el aumento de los salarios durante tres décadas, que son de los más baratos del mundo. La fuerza de trabajo es la mercancía que más exportamos al extranjero, millones de mexicanos se ven obligados a abandonar a sus familias, su cultura y costumbres para poder subsistir.
El actual Sistema Político producto de la Revolución Mexicana de 1910-17, se encuentra en un proceso de Crisis y descomposición irreversible que no admite reforma o recomposición alguna. Las instituciones del Estado, como el Presidencialismo, el Corporativismo, el Ejército, los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, viven una crisis de legalidad y legitimidad, no visto desde principios del siglo XX.
El Sistema Electoral Mexicano, la clase Política y todos los partidos Políticos viven en crisis ascendente, no tienen credibilidad alguna, a pesar de sus mini-reformas, son rechazados por la gran mayoría de los Mexicanos. No son verdaderos Partidos, son agencias de colocaciones manejados por tribus, mafias políticas y familiares que venden las curules, puestos públicos y partidarios al mejor postor y a sus incondicionales. Sus programas y candidatos no representan los intereses de los trabajadores, ni de la mayoría de los mexicanos, reprimen, despojan y asesinan donde son gobiernos al pueblo que resiste y lucha por un país más justo. Atenco y Oaxaca son los mejores ejemplos de cómo se confabulan, PRD, PRI y PAN, para asesinar y reprimir a estos dignos pueblos, que luchan por sus tierras, cultura y costumbres. En las actuales condiciones del país, todos los partidos políticos y Asociaciones, legitiman al Capitalismo, al putrefacto Estado Mexicano a su caduco Sistema Electoral, recibiendo canonjías y prerrogativas para someterse a las reglas de la “Democracia Electoral representativa”.
Ante toda situación descrita y más, ante la creciente crisis económica, se profundiza el descontento y se da la organización de los de abajo. Ante la gran crisis y debilitamiento del Estado, los espacios y vacíos políticos se multiplican, el desgaste e incapacidad del viejo Sistema Político se profundiza, la lucha de clases, los campos de acción, las alianzas, las clases, los sectores y estratos de clase se definen.
El Estado responde con represión, militarización del país y criminalización de las luchas sociales. La impunidad se hace regla cotidiana. Se aumenta sustancialmente el presupuesto militar, así como los salarios y las prestaciones de los militares asesinos y represores. Vivimos prácticamente en estado de sitio.
Hoy, al igual que en el México de principios del siglo XIX, dos grandes disyuntivas se definen: La que plantea que el Sistema Económico y Político Mexicano actual, con un cúmulo de reformas, mejor dicho contrarreformas y parches, todavía tiene solución y compostura, que una buena Reforma económica, con su Ley Antimonopolios, que con la privatización de Petróleos Mexicanos que no dejó contentos a ninguno y su entrega al capital extranjero, con una Reforma Fiscal, con la reforma a la Educación y su entrega a la Mafia de ELVA ESTHER GORDILLO y sobre todo con la Reforma a la Ley Federal del Trabajo y al artículo 123 constitucional, los cuales han sido modificados en los hechos y a toda la seguridad Social, es decir acabar de una vez con todos los derechos, conquistas y organizaciones de los trabajadores.
La Reforma Política del Estado Mexicano, la Reforma a su sistema de Partidos y Electoral, concertada desde arriba, las modificaciones a la caduca comisión Nacional de Derechos Humanos y contra parte, LA PETICIÓN DEL SECRETARIO DE LA DEFENSA a la Cámara de Diputados, para implantar de hecho el Estado excepción y que permitiría a los SOLDADOS, cosa que la policía ya realiza, ingresar a domicilios particulares sin orden judicial y detener a sospechosos por 24 horas sin presentarlos a autoridad civil alguna, con la Reforma a la Seguridad Pública y la represión creciente a los que resisten y luchan sería la solución para mantener este sistema de injusticias y explotación Capitalista por otros cien años cuando menos, ¡Fácil no!
LA OTRA CAMPAÑA y otras organizaciones Anticapitalistas, que decimos que este viejo Sistema ya no tiene solución, que está acabado, que no cabe reforma alguna de solución verdadera, que la única alternativa, para la gran mayoría de los Mexicanos es la de transformar radicalmente este sistema injusto y criminal por una Sociedad totalmente nueva, en la que no exista explotación, ni propiedad privada, ni burocracia Estatal, que exista propiedad social de los medios de producción, que exista Justicia y Libertad verdaderas, en la que se respeten y se promuevan Y APLIQUEN todos los derechos Políticos por igual, culturales, sexuales, de género, de salud, educación, ecológicos, y de respeto a los derechos, costumbres y Cultura de los Pueblos Indígenas.
Esta política exterminadora contra los mexicanos, de los gobiernos Capitalista Neoliberales, mantiene a millones de trabajadores luchando y resistiendo en el campo y las ciudades de todo México, las luchas surgen en todos loes ejidos, pueblos, comunidades, calles, barrios, colonias, luchando al margen de organizaciones políticas oficiales, partidos, instituciones del Estado y civiles, asociaciones, sindicatos y líderes corporativizados.
También existen miles de mexicanos luchando con partidos políticos, sindicatos y con direcciones reformistas y corporativizadas, que necesariamente los llevan a luchas equivocadas y frustrantes, como en el caso de los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas, SU DIRECCIÓN SINDICAL SE OPUSO a la toma de los Centros de Trabajo, que demandaban sus agremiados. Las cuales plantean reformar el Sistema Capitalista, para “mejorarlo”. Esta etapa de lucha deberá ser superada, EN EL CORTO PLAZO, POR LA CONCIENTIZACIÓN Y ORGANIZACIÓN, de los mismos trabajadores. Solamente ellos organizados como clase serán capaces de liberarse de este yugo del sistema capitalista, que nos oprime.
En esta tarea empeñados los trabajadores del campo, la ciudad y del mar organizados en el Sector de Trabajadores que somos adherentes a la Otra Campaña, solo con un Programa Nacional, una organización de clase para sí y la Acumulación de fuerzas necesarias EN TORNO A ESE PROGRAMA, podremos derrotar a este sistema Capitalista.
LIBERTAD PRESOS POLÍTICOS
NI PERDÓN NI OLVIDO CASTIGO A LOS ASESINOS
ALEXIS VIVE LA LUCHA SIGUE
Ángel Benhumea Salazar
Abril 2010
La Crisis actual del Sistema Capitalista es una crisis Mundial de carácter GENERAL, de todos los ordenes Económico, Social, Político, Cultural, Cultural e Ideológico, que abarca el conjunto del sistema mundial y que cuestiona los sustentos ideológicos de dominación burguesa, la cual agrava de manera considerable la situación de la clase Obrera, de los Trabajadores del Campo, la Ciudad y el Mar y de todos los explotados y oprimidos. El capitalismo enfrenta hoy la crisis más profunda de que se tenga memoria.
La crisis de sobreproducción, se desarrolla en el Mundo y en México de manera acelerada, no obstante los grandes recursos que se han canalizado para evitar a catástrofe. Grandes STOKS de productos de productos se encuentran depositada en fábricas y almacenes, sin posibilidad de convertirse en mercancías, en el corto y mediano plazo, de ser adquiridas, por cada vez más grandes contingentes de desempleados y por millones de trabajadores con salarios miserables y sin seguridad social, sin posibilidad de adquirir los alimentos necesarios y servicios elementales para su supervivencia.
Miles de pequeñas, medianas y grandes empresas Industriales de Servicios y no pocas Bancarias y Financieras están en bancarrota, algunas empresas trasnacionales y monopólicas apoyadas por el Estado se comen a las demás. De manera vertiginosa, la concentración del capital comercial, de servicios, industrial y financiero pasa a su fase centralizada. Toda la riqueza social creada por los obreros y trabajadores del campo y la ciudad en manos de un grupo cada vez menor de insaciables capitalistas.
El imperio ha sido incapaz, hasta el momento, de reproducir un modelo económico alternativo al caduco modelo neoliberal, por lo cual se ve obligado a recurrir a otros viejos modelos de acumulación, como el keynesianismo y al vituperiado Capitalismo Monopolista de Estado.
Ante ésta situación sin precedentes, su Estado Capitalista surge como “el gran salvador” de esta crisis sin solución, reprime, asesina, subsidia, compra, ayuda, regala,, viola sus propias leyes, extorsiona, TAMBIÉN DE MANERA GENERALIZADA. Y sobre todo se apropia indiscriminadamente de los recursos de todos los contribuyentes, de los ahorros, de las pensiones y jubilaciones, de los salarios de las prestaciones, de las conquistas y de las organizaciones de la Clase Obrera, de los trabajadores del campo y la ciudad, para intentar evitar la gran DEVACLE, una GUERRA de clases en toda su intensidad.
Como todos sabemos, la economía mexicana es una de las economías más ligadas y dependientes de la Norteamericana, por lo que la crisis en México tendrá mayor profundidad y duración. Independientemente de la crisis en E.U. y Mundial, México se encuentra sumergida en una crisis de carácter estructural, el capitalismo mexicano, y su modelo Neoliberal desechado ya por otros países, no satisfacen las necesidades más elementales de los mexicanos de trabajo, alimentarias, de salud, vivienda, educación, seguridad social.
Más de 60 millones de mexicanos viven en la miseria y sin seguridad, social, 18 millones de trabajadores mexicanos subsisten con escasos dos salarios mínimos, 8 millones y la ciudad se ven obligados a emigrar al extranjero en busca de mejores condiciones de vida, las remesas enviadas por los mexicanos en el extranjero han disminuido en 5 mil millones de dólares, el trabajo informal supera 10 millones de mexicanos, la crisis productiva en el campo desborda todo mecanismo de control y subordinación de los distintos trabajadores del campo a las instituciones corporativas del Estado Mexicano. Que durante 60 años le funcionaron.
La crisis en México ha generado escasez y aumento en los precios de los productos básicos y agrícolas, se manifiesta, entre otras, en Industria manufacturera y en la industria automotriz mexicana y necesariamente en industrias conexas y dependientes de esta. El desempleo ha crecido sustancialmente, a pesar de lo que diga el gobierno, así como la deuda pública y privada, alza en todos los servicios a la población. En México, el mayor precio de los alimentos eleva hasta en 100 mil millones de pesos, equivalente a un punto del PIB, por pago de importaciones de alimentos, que afectan cada vez más a todos los mexicanos. Vivimos un proceso inflacionario ascendente, aunque el mal gobierno lo niegue.
La política salarial y laboral del gobierno es un fracaso, quita todos los derechos sociales y laborales, conquistadas por los trabajadores durante un siglo, como las prestaciones, la seguridad social, con las reformas al IMSS y al ISSSTE. Elimina sus organizaciones sociales y políticas, y se propone terminar con ellas, con la modificación de la Ley Federal del Trabajo.
El mal gobierno ha cometido el aumento de los salarios durante tres décadas, que son de los más baratos del mundo. La fuerza de trabajo es la mercancía que más exportamos al extranjero, millones de mexicanos se ven obligados a abandonar a sus familias, su cultura y costumbres para poder subsistir.
El actual Sistema Político producto de la Revolución Mexicana de 1910-17, se encuentra en un proceso de Crisis y descomposición irreversible que no admite reforma o recomposición alguna. Las instituciones del Estado, como el Presidencialismo, el Corporativismo, el Ejército, los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, viven una crisis de legalidad y legitimidad, no visto desde principios del siglo XX.
El Sistema Electoral Mexicano, la clase Política y todos los partidos Políticos viven en crisis ascendente, no tienen credibilidad alguna, a pesar de sus mini-reformas, son rechazados por la gran mayoría de los Mexicanos. No son verdaderos Partidos, son agencias de colocaciones manejados por tribus, mafias políticas y familiares que venden las curules, puestos públicos y partidarios al mejor postor y a sus incondicionales. Sus programas y candidatos no representan los intereses de los trabajadores, ni de la mayoría de los mexicanos, reprimen, despojan y asesinan donde son gobiernos al pueblo que resiste y lucha por un país más justo. Atenco y Oaxaca son los mejores ejemplos de cómo se confabulan, PRD, PRI y PAN, para asesinar y reprimir a estos dignos pueblos, que luchan por sus tierras, cultura y costumbres. En las actuales condiciones del país, todos los partidos políticos y Asociaciones, legitiman al Capitalismo, al putrefacto Estado Mexicano a su caduco Sistema Electoral, recibiendo canonjías y prerrogativas para someterse a las reglas de la “Democracia Electoral representativa”.
Ante toda situación descrita y más, ante la creciente crisis económica, se profundiza el descontento y se da la organización de los de abajo. Ante la gran crisis y debilitamiento del Estado, los espacios y vacíos políticos se multiplican, el desgaste e incapacidad del viejo Sistema Político se profundiza, la lucha de clases, los campos de acción, las alianzas, las clases, los sectores y estratos de clase se definen.
El Estado responde con represión, militarización del país y criminalización de las luchas sociales. La impunidad se hace regla cotidiana. Se aumenta sustancialmente el presupuesto militar, así como los salarios y las prestaciones de los militares asesinos y represores. Vivimos prácticamente en estado de sitio.
Hoy, al igual que en el México de principios del siglo XIX, dos grandes disyuntivas se definen: La que plantea que el Sistema Económico y Político Mexicano actual, con un cúmulo de reformas, mejor dicho contrarreformas y parches, todavía tiene solución y compostura, que una buena Reforma económica, con su Ley Antimonopolios, que con la privatización de Petróleos Mexicanos que no dejó contentos a ninguno y su entrega al capital extranjero, con una Reforma Fiscal, con la reforma a la Educación y su entrega a la Mafia de ELVA ESTHER GORDILLO y sobre todo con la Reforma a la Ley Federal del Trabajo y al artículo 123 constitucional, los cuales han sido modificados en los hechos y a toda la seguridad Social, es decir acabar de una vez con todos los derechos, conquistas y organizaciones de los trabajadores.
La Reforma Política del Estado Mexicano, la Reforma a su sistema de Partidos y Electoral, concertada desde arriba, las modificaciones a la caduca comisión Nacional de Derechos Humanos y contra parte, LA PETICIÓN DEL SECRETARIO DE LA DEFENSA a la Cámara de Diputados, para implantar de hecho el Estado excepción y que permitiría a los SOLDADOS, cosa que la policía ya realiza, ingresar a domicilios particulares sin orden judicial y detener a sospechosos por 24 horas sin presentarlos a autoridad civil alguna, con la Reforma a la Seguridad Pública y la represión creciente a los que resisten y luchan sería la solución para mantener este sistema de injusticias y explotación Capitalista por otros cien años cuando menos, ¡Fácil no!
LA OTRA CAMPAÑA y otras organizaciones Anticapitalistas, que decimos que este viejo Sistema ya no tiene solución, que está acabado, que no cabe reforma alguna de solución verdadera, que la única alternativa, para la gran mayoría de los Mexicanos es la de transformar radicalmente este sistema injusto y criminal por una Sociedad totalmente nueva, en la que no exista explotación, ni propiedad privada, ni burocracia Estatal, que exista propiedad social de los medios de producción, que exista Justicia y Libertad verdaderas, en la que se respeten y se promuevan Y APLIQUEN todos los derechos Políticos por igual, culturales, sexuales, de género, de salud, educación, ecológicos, y de respeto a los derechos, costumbres y Cultura de los Pueblos Indígenas.
Esta política exterminadora contra los mexicanos, de los gobiernos Capitalista Neoliberales, mantiene a millones de trabajadores luchando y resistiendo en el campo y las ciudades de todo México, las luchas surgen en todos loes ejidos, pueblos, comunidades, calles, barrios, colonias, luchando al margen de organizaciones políticas oficiales, partidos, instituciones del Estado y civiles, asociaciones, sindicatos y líderes corporativizados.
También existen miles de mexicanos luchando con partidos políticos, sindicatos y con direcciones reformistas y corporativizadas, que necesariamente los llevan a luchas equivocadas y frustrantes, como en el caso de los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas, SU DIRECCIÓN SINDICAL SE OPUSO a la toma de los Centros de Trabajo, que demandaban sus agremiados. Las cuales plantean reformar el Sistema Capitalista, para “mejorarlo”. Esta etapa de lucha deberá ser superada, EN EL CORTO PLAZO, POR LA CONCIENTIZACIÓN Y ORGANIZACIÓN, de los mismos trabajadores. Solamente ellos organizados como clase serán capaces de liberarse de este yugo del sistema capitalista, que nos oprime.
En esta tarea empeñados los trabajadores del campo, la ciudad y del mar organizados en el Sector de Trabajadores que somos adherentes a la Otra Campaña, solo con un Programa Nacional, una organización de clase para sí y la Acumulación de fuerzas necesarias EN TORNO A ESE PROGRAMA, podremos derrotar a este sistema Capitalista.
LIBERTAD PRESOS POLÍTICOS
NI PERDÓN NI OLVIDO CASTIGO A LOS ASESINOS
ALEXIS VIVE LA LUCHA SIGUE
Ángel Benhumea Salazar
Abril 2010
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